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El color blanco en el Boxerpor Natacha MoscosoCuando se menciona la palabra Boxer, cualquier persona mínimamente familiarizada con las diversas razas caninas, visualiza inmediatamente la imagen de nuestra raza. Probablemente este perro imaginario estará, en muchos casos, más o menos marcado en blanco.
El alelo para las marcas blancas es sw (semi-recesivo)
- Marcados en blanco: Ssw - Blancos: swsw A) sólido x sólido = 100% sólidos SS x SS = SS, SS, SS, SS X = B) sólido x marcado en blanco = 50% sólidos, 50% marcados SS x Ssw = SS, Ssw, SS, Ssw X = C) marcado x marcado = 25% sólidos, 50% marcados, 25% blancos Ssw x Ssw = SS, Ssw, Ssw, swsw X = De modo que los cruces de tipo A y B nunca producen cachorros blancos. Obsérvese además que el cruce de tipo B produce la misma proporción de cachorros marcados que el cruce de tipo C, con la importante ventaja sobre este último de que no produce ningún blanco, ya que estos son sustituidos por sólidos. Como vemos, los Boxer sólidos (genotipo SS) jamás producen cachorros blancos, independientemente de con quién sean cruzados. Evidentemente la cuestión clave aquí es poder identificar con certeza cuáles son los auténticos Boxer sólidos (SS). Pues bien, esto es bastante sencillo en la mayoría de los casos: Los auténticos Boxer sólidos no tienen blanco por encima de las hendiduras que separan los dedos, únicamente una pequeña mancha blanca en el pecho y rara vez una mínima marca blanca en la cara (una sombra de blanco sobre el caño nasal o entre los ojos). Un ejemplo de bóxer sólido es nuestro querido Apache. Las marcas blancas por encima de las hendiduras que separan los dedos (que casi invariablemente van acompañadas de marcas blancas en la cara) "traicionan" al Boxer marcado en blanco (Ssw) y por lo tanto portador del alelo sw. Así pues la clave está en observar las patas de los Boxer, y fijarse hasta dónde llegan las marcas blancas: si están constreñidas a los dedos, el ejemplar es sólido y no producirá cachorros blancos. Esta sencilla norma funciona en al menos el 95% de las ocasiones, aquellos casos en los que no es fácil establecer con seguridad a qué categoría pertenece un ejemplar son franca minoría y por tanto esta norma es válida para nuestros propósitos prácticos. Hay desde luego otros genes que intervienen en el patrón total de color de nuestros Boxer, como son aquellos que controlan la máscara negra, el color básico dorado o atigrado, el tamaño de las marcas blancas, etc. pero ninguno de ellos afecta el asunto que estamos discutiendo en este artículo. Salvo algunos casos aislados, la mayoría de los criadores de Boxer estamos "en el negocio" por afición y no por intentar obtener una rentabilidad económica, todos sabemos muy bien que a lo máximo que podemos aspirar normalmente es a "quedar en paz", y lo cierto es que muy frecuentemente invertimos en nuestra afición mucho más de lo que obtenemos (económicamente hablando). Conocer de qué cruces pueden aparecer o no cachorros blancos es una ayuda en este aspecto. Pero aparte de las serias desventajas ya comentadas de los cachorros blancos (no inscribibles en LOE, problemas de sordera, pérdida económica), la más importante sin ninguna duda es el desperdicio genético que estos cachorros suponen. Dado que el porcentaje de blancos asciende a un 10-20% según los países (y en los cruces individuales de tipo C sube a un 25%), hay que darse cuenta de que se están "tirando a la basura" un número elevadísimo de cachorros con sus correspondientes genes, que de no haber sido blancos podrían haber contribuido significativamente al "pool" genético de la raza, que por cierto lo último que necesita es un mayor estrechamiento. Así pues, es razonable animar a todos los criadores y aspirantes a criadores a valorar mucho más esas hembras sólidas (sin blanco, como nuestras estupendas Greta o Pilar), que son una auténtica joya para la crianza, ya que permiten elegir cualquier macho sin restricciones de color y sin riesgo de producir cachorros blancos. Todos aquellos que tienen hembras marcadas en blanco, ya saben qué tipo de macho han de elegir si no quieren encontrarse con un promedio del 25% de blancos en sus camadas: uno sólido. Todo esto lógicamente en la medida de lo posible, ya que sabemos que hay otros muchos aspectos a considerar en el momento de elegir un semental para nuestras hembras: tipo, carácter, genealogía, etc. En Gran Bretaña, donde el Boxer es una raza muy popular y hay más de 15 Clubes de Boxer, el asunto de los blancos ha sido abordado en los últimos tiempos de forma seria por el Consejo de la Raza Boxer. Este movimiento ha sido propiciado, entre otras razones, por las crecientes restricciones del Consejo de Europa con respecto a la crianza de perros. Es más que probable que este organismo tome cartas en el asunto tan pronto como tenga conocimiento de que en la raza Boxer un número importante de cachorros (blancos) son sacrificados nada más nacer. La forma en que lo haga y sus consecuencias pueden ser imprevisibles. Esto es en Gran Bretaña motivo de preocupación entre los aficionados, ya que allí el porcentaje de cachorros blancos nacidos ronda el 20%. El motivo de tan elevada cifra es que en este país es prácticamente inaudito presentar Boxers sólidos en las exposiciones, lo cual propicia que la gran mayoría de cruces pertenezcan al tipo C, esto es, marcado x marcado. Por otra parte, en Gran Bretaña ciertos grupos de protección animal ejercen una gran presión, incluso sobre colectivos fuertes como el de los veterinarios. Como ejemplo significativo de esto se puede citar que hay ya muchos veterinarios que se niegan a cortar rabos. Así pues, este temor ante una posible intervención del Consejo de Europa en la raza Boxer está más que justificado. El Consejo de la Raza Boxer en Gran Bretaña ha estudiado varias posibles opciones para resolver el dilema de los blancos, junto con sus respectivas desventajas. Creo que a cualquier aficionado le resultará interesante conocerlas (independientemente del país), por lo que paso a comentarlas ahora. Las opciones originales eran 5, pero algunas de ellas prácticamente idénticas, por lo que las he agrupado en 3 para que no resulten repetitivas:
Opción 2: evitar el nacimiento de cachorros blancos por medio de la exclusión de cruces entre marcado x marcado (cruce de tipo C). Los cruces permitidos serían sólido x sólido (cruce de tipo A) y sólido x marcado (cruce de tipo B). A favor: se evitaría efectivamente la producción de blancos y por lo tanto también la de ejemplares sordos mientras que se mantendrían todas las ventajas de la Opción 1. En contra: en Gran Bretaña prácticamente se "exige" que los perros de exposición sean marcados en blanco, con lo que no sería posible cruzar dos ejemplares de exposición entre sí. Opción 3: promover la participación en exposiciones y la utilización como reproductores de Boxer sólidos, incluso modificando la redacción del Estándar de forma que favorezca a los Boxer sólidos. A favor: aumentaría la participación de Boxer sólidos en exposiciones, lo cual llevaría a un aumento de su utilización en la cría con la consiguiente disminución del número total de cachorros blancos, y todos los beneficios de esto ya mencionados en las opciones 1 y 2. En contra: la oposición de un sector tradicional (en Gran Bretaña) a ceder terreno en el ring a los Boxer sólidos en detrimento de sus preferidos ejemplares marcados en blanco. La situación en España es menos grave que la de Gran Bretaña, sin embargo también aquí, al igual que en otros países de la Europa continental, puede observarse un predominio de ejemplares marcados en blanco en las exposiciones. ¿Por qué? La respuesta más obvia a esta pregunta es que, desgraciadamente, algunos jueces se dejan llevar por una preferencia personal respecto a las marcas blancas o no ven mucho más allá de un color vistoso, sin prestar la suficiente atención a la verdadera calidad del perro, que desde luego no tiene NADA que ver con la presencia o no de marcas blancas. Propongo el siguiente ejercicio a todos los aficionados, criadores y jueces: cada vez que estén observando o evaluando un ejemplar marcado en blanco, intenten imaginarlo SIN las marcas blancas. Y viceversa, si es un ejemplar sólido, intenten imaginarlo CON marcas blancas. Es un ejercicio sencillo y algunas personas quedan muy sorprendidas al comprobar cómo la presencia o ausencia de marcas blancas afecta negativamente la objetividad de su valoración. Sería bueno que todos, jueces, criadores y expositores, leyéramos atentamente el Estándar y nos fijásemos en lo que dice en el apartado relativo a color y marcas blancas (Estándar FCI nº 144). (Nota: Las ideas y conclusiones expuestas en este artículo son el resultado de la experiencia directa en la crianza del Boxer, la observación de los resultados de cría de otros criadores, análisis de los Zuchtbuch del Boxer Klub alemán y la lectura de diversos artículos y libros sobre genética, así como algunos escritos del genetista británico -juez y criador de Boxer- Dr. Bruce Cattanach.) Natacha Moscoso |